Como somos. El simple echo de que nos cambien un cepillo de dientes puede causar toda una oleada de sensaciones. El simple echo de cambiar nuestra rutina puede hacernos creer (o sentir) q nuestra realidad ha cambiado. Todos deseamos q nos ocurran cosas que nos hagan sentir diferentes, especiales, que nos haga sentir que somos algo mas de lo que eramos hace unos cuantos minutos, horas o días, algo q realmente no somos (¿o si?), q realmente servimos/importamos para algo/para alguien. Si vivir consiste en acumular experiencias (buenas o malas) todos debemos por un momento (por lo menos) sentir una felicidad efimera que creamos que nos llena lo suficiente como para tener fuerzas para continuar. Esto se consigue de muchas maneras, pero el simple echo de que cambiemos de cepillo de dientes nos puede envolver en toda una nueva vida de sensaciones. Así q cambiemos nuestro cepillo diariamente, esperemos el nuevo dia con esperanza, con la esperanza del q espera que las cosas no vuelvan a ser como fueron y q mañana sea un nuevo camino q recorrer lleno de atascos, golpes, baches y semaforos en verde en los que buscaremos nuestra felicidad.

Nada q decir, nada q escribir, mucho q sentir, mas q vivir.